YO PUEDO – Inmaculada Cazorla Guirado

Por Inmaculada Cazorla Guirado

Érase una vez en un bosque muy lejano una pequeña ardilla llamada Pipa que vivía muy feliz con su familia. Pero ella quería ir más allá y no quedarse sólo en el bosque quería conocer el mundo y viajar. Poder ver otras culturas otros animales y conocer nuevos amigos.

Sus padres y amigos siempre le decían que no lo hiciera porque el mundo era muy peligroso . Pero Pipa siempre pensaba quiero conocer cómo viven los demás animales además de otros paisajes no sólo el bosque.

Viendo su mamá  que estaba convencida de irse quiso darle un susto para que se le quitarán las ganas de viajar. Le dijo Pipa si subes esa montaña sin ayuda de nadie seguro que puedes con cualquier cosa. Era una montaña muy empinada y además llena de peligros pero Pipa era muy valiente y aunque todos decían que no, ella se decía : YO PUEDO .

Llegó el día , era temprano y sigilosamente bajé la escaleras abrí la puerta de la calle. En ese momento respire y pensé: «Yo Puedo».

Cerré la puerta sin hacer mucho ruido y empecé a dirigirme a la gran montaña . Sabía que no iba a ser fácil pero tenía que empezar en algún momento, así que vamos allá.

Siguiendo el sendero di los primeros pasos y me sentí muy contenta. El camino se elevaba y mis pasos se hacían más cortos además que me costaba respirar. Era un esfuerzo muy grande pero seguía feliz.

De pronto sentí que alguien estaba detrás mío entonces miré y detrás de un árbol vi una figura pequeña , menuda y con mucha luz. Se acerco a mí para darme ánimos y decirme que era muy fuerte por intentar subir la montaña.

Pipa entonces le pregunto: Cómo te llamas y quien eres? Me llamo Po y soy un duende del bosque que protejo a los diferentes animales y plantas del bosque. Pero me has parecido una buena niña además se nota mucho tus ganas por explorar sin hacer daño y aprender de todo lo que ves. Lo único que te voy a pedir es que no tires papeles al suelo y lo que te vayas a comer es lo que puedes coger, no más. Trata bien el entorno, los animales y las plantas para que ellos te respeten a ti también.

Respeta para ser respetado ese es mi lema le dijo Pipa – Buen viaje y ya sabes si necesitas algo con decir PO llegaré en un segundo.

Nuestra Pipa siguió su camino sabiendo que no estaba sola en su aventura ya había conocido a un amigo y entonces pensó:» Madre mía lo que me queda por vivir»

Se dio cuenta que la elevación del camino era mayor pero que cambiaba de forma ya no era recto sino con curvas y a los lados había círculos de muchos colores.

De pronto uno de esos círculos se abrió convirtiéndose en una bella flor con una cara muy especial y bonita. Le preguntó:¿ cómo te llamas ? Me llamo Pipa y estoy subiendo la montaña para alcanzar mi meta personal. La flor le dijo: No vas a poder, yo de ti bajaría y me quedaría en mi casa tan a gusto . Pipa le respondió: Es tu opinión pero no me ayudas nada así que deseo que te vaya bien pero voy a seguir mi camino.

En eso mismo Pipa dudo de volver a su casa pero pensó en Po y en sus palabras de ayuda . No todos los seres que se iba a encontrar por el camino le dirían lo que ella quiere escuchar .Así que en esos casos mejor dejar atrás y seguir su camino.

A lo lejos al mirar hacia arriba pudo ver una enorme luz encima de una casa, esa era su meta. Ya le quedaba menos pero todavía debía seguir el camino que cada vez era más difícil y con más obstáculos.

Pero nuestra Pipa sentía una felicidad en su cuerpo por ver desde lejos el final del camino que sus piernas iban más deprisa. Tuvo que parar en seco porque se asfixiaba pero tomo aire y siguió sin pensarlo dos veces.

Desde un árbol cercano escuchó una pequeña voz que le decía: Ven Pipa acércate sin miedo. Ella lo hizo así y vio una pequeña puerta la cuál abrió sin  pensarlo dos veces . Y la sorpresa fue genial, era un hada del bosque que estaba siguiendo la carrera de nuestra amiga Pipa y le dijo: Tú puedes con todo ya te queda poco no hagas caso a lo que te digan porque es su cometido . Intentarán que dudes de ti y vuelvas a tu casa pero tu objetivo es otro así te doy todas mis fuerzas para que lo consigas sin ninguna duda. Lo único que te pido que cuando llegues arriba me expliques a la vuelta lo que has visto porque yo no tengo el impulso que tienes tú pero si la curiosidad de saber que hay allá arriba.

Pipa sin dudarlo le dio las gracias y por supuesto cuando terminará su experiencia a la vuelta le contaría todo lo que sus ojos han podido ver. Se despidió del hada y siguió su camino sin problema.

Cada vez la luz era más fuerte y la casa más grande ya no queda nada para llegar. Se iba a cumplir su sueño e iba a ser libre no le faltaba nada. Respiro hondo y dio los últimos pasos antes de casi terminar pero cuál fue su sorpresa que justo delante de la casa había un precipicio enorme tan grande que no se veía el final .

Ella se sentó un segundo y pensó tengo mucho miedo pero tengo que afrontar mis miedos ya no queda nada a por todas eso es a por todas. Dio un enorme salto con todas sus fuerzas y llegó al final de su camino .

Ya estaba justo debajo de la luz y tenía la puerta de la entrada de la casa en frente de su cara. Entonces sin pensarlo dos veces tocó y se abrió la puerta . Lo que Pipa pudo ver era un mundo de fantasía donde todo el mundo era feliz donde no había maldad, ni guerras ni heridas. Flotaba todo el reto encima de nubes rosas era un sueño maravilloso pero pensó -echo mucho de menos a mi familia asi que allí es donde mejor puedo estar-.

Eso es lo que hizo Pipa volvió con su familia pero era libre para volver a recorrer más aventuras y eso es precisamente lo que veremos en el próximo cuento.

 

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