LAS ESTACIONES DEL AMOR

He escogido estos cuatro poemas y, al igual que hay cuatro estaciones, he optado por que esas estaciones sean del amor. Como las fases por las que pasa con el tiempo. Por ello, ni puse títulos a ninguna de las poesías, sino que decidí poner: I, II, III; IV, y el tema ser uno solo «Las estaciones del amor», tíyulo del plaquette.

I.

¡Míralo! Caminando descalzo

como si supiera lo que está
pisando. Vaga esparcido por
el espacio en miles de pedazos,
como un puzle inacabado que
tan difícil es recomponer.

Los trozos cortan como cristal.
Cuales hojas finas de papel
translúcidas como el agua, puedes

ver toda su tristeza a través
de su mirada desamparada.
¿Cómo despedirte de tu amor?

II.

Baile de calaveras que

en banquetes de funerales

caen sueños en escombreras.

Los cuerpos flotan sin espíritus.

Lloran encerrados en los

calabozos de sus cabezas.

Maniatada a recuerdos que

van torturando lentamente.

A veces faltan fuerzas y

por momentos dejamos de

respirar, morimos sin más.

El amor da la vida pero…

III.

Después de Esther ya no habrá más nadie.

No habrá ninguna más después de ella.

No quiero recordar mi último beso

con otro nombre, que no sea el suyo.

No puedo estar engañando a otras

personas pues si no eres tú, me sobran.

No soy digna de amar a otra mujer

porque sé que a nadie amaré como

a ti.

No quiero recordarte en otro cuerpo.

No puedo amar más, pues sé, que ya solo

puedo hacer daño. No me queda amor

por dentro porque por corazón luzco un

féretro.

No creo en el amor porque siempre acabo

rota tendiendo mi alma bajo la tormenta.

Me pregunto cómo pueden brotar palabras en

corazones infértiles. Me ahogo en el

fondo de cada botella. dime ¿Hasta dónde

he de creer? ¿Hasta dónde he de seguir? ¿Hasta

dónde no es tóxico el amor? dímelo tú…