NATURALEZA VIDA INTERRUMPIDA – Mª Luisa Guix Aguado

Enigma, inquietud, sorpresa, tristeza, alegría es la vida. Somos parte de la naturaleza a la que muchas veces damos la espalda, pero la necesitamos.
De ahí, creo que parte la voz poética, en donde el desconcierto se hace presente, debido a la lejanía muchas veces de la siempre añorada madre naturaleza.
Y eso ocurre porque el ensamblaje de las ciudades acalla las voces poéticas con su ruido. Es en el silencio donde podemos escucharnos.

El orden de los poemas responde: Título. Primer poema, INQUIETUD, segundo, VOZ POÉTICA, tercero EN LA CIUDAD y cuarto, ERASE UN ARBOL.

INQUIETUD

Iniciamos caminos sinuosos.
Pasamos por estrechos desfiladeros…
Pensamos ideas peregrinas….
Sin embargo, vivimos.

VOZ POÉTICA

La poesía es
un amante.
Silencio,
viene,
me emociono, calla,
no te entiendo

EN LA CIUDAD

Los ogros digamos, útiles en la urbe.
Los autobuses
Mosquitos de la modernidad.
Las motos con su ruido
Luces de la conciencia. Semáforos

Democracia verdadera.
La playa.

Los libros guardan
sorpresas convenientes
.
.

SOBRE UN ARBOL

Un árbol naciente quiso crecer
Oteaba a menudo el horizonte
le agradaba su aroma oler
y consiguió el aire circundante.
Su belleza aumentaba sin caer,
Atrajo a otro árbol acompañante
se acercó para prevalecer
el resultado fue: tres brancas amantes
Surgieron para ser y para permanecer.
El árbol vivía ahora mejor que antes,
proveía a sus ensanches a ser,
y llegó la plenitud apremiante.
y ha podido reverdecer
ahora otea de nuevo el horizonte,
en el que no dejan de meter,
guerras y peleas oxidantes.
Qué pena el así perder
tantas realidades estantes,
espera el árbol convencer
y no se quede el mundo tras tocante.