HÁBLAME, POLLITO
Hay nombres que son toda una metáfora. Como por ejemplo la elección por parte de Microsoft de la palabra Windows para bautizar sus sistemas operativos. Ellos se referían a otro…
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Leo con interés una noticia médica que habla de un fenómeno que desconocía. Lo llaman el efecto nocebo, y es la otra cara de la moneda, o mejor aún, el…
La Asociación Canal Literatura inicia la octava edición del certamen “Poemas sin Rostro” en los que colabora haciendo un seguimiento de su desarrollo y donando los premios en metálico, la…
Llevo muchos años viviendo en España, mis hijas son españolas, mi marido también lo era y adoro este país. Sin embargo, los que no hemos nacido aquí, conservamos, por lo…
Uno de los tópicos más sobados es el de la profesión más antigua del mundo. Basta mencionar esta frase para que cualquiera entienda que se habla de la prostitución. Sin…
Soy extremadamente puntual. Pertenezco a esa menguante clase de personas que llega diez minutos antes a una cita, por lo que más de una vez me he visto dando vueltas a la manzana con un frío que pela o un sol abrasador hasta que da la hora exacta y puedo llamar al telefonillo y decir aquí estoy. Y todo se debe a un trauma infantil. Mi madre era una de esas mujeres tan extraordinariamente bellas a las que se les perdona todo. ¿Se han fijado en que las guapas suelen ser impuntuales? Mamá tenía por costumbre llegar la última a todas partes. Si se trataba de una fiesta, cuando ya los presentes habían agotado el tema de conversación y los whiskies comenzaban a hacer su beatífico efecto entraba ella en escena radiante, como una aparición dejando a todos boquiabiertos. Lo malo es que esta costumbre que tan buenos réditos sociales le daba, se extendía a todos los órdenes de su vida y también de la nuestra. Aún me recuerdo embarcando media hora tarde en aviones que milagrosamente nos esperaban y en los que pocos eran los que protestaban, tal vez, como decía Baudelaire, porque «la belleza del cuerpo es un sublime don que de toda infamia arranca un perdón”.
Soy neófita en esto de las redes sociales pero no tanto como para no darme cuenta de sus virtudes y defectos. Como suele ocurrir en casi todos los órdenes de…
En mi vasta incultura, jamás había oído hablar de Konrad Lorenz. Y sin embargo, este caballero, premio Nobel de Medicina, está considerado el padre de una muy interesante rama de…
Hace unas semanas saltó a las páginas de los periódicos la noticia de que un instituto de enseñanza de Gijón, había pedido permiso a los padres para “corregir mediante contacto…
Hay un tema que hace tiempo quiero abordar y no me atrevo. Trata de las cosas que uno no puede decir so pena de quedar como un raro o, peor…