NOCHES SIN LUNA – Adriana Lucía Linares Calderón

“Hay cosas encerradas dentro de los muros que si salieran de pronto a la calle y gritaran, llenarían el mundo”

Federico García Lorca

Introducción                                                                 

Los poemas,tratan de conectar con las emociones oscuras,aquella                                               

oscuridad que sólo en noches sin Luna se pueden apreciar.

Amarguras de aquella decepción,situaciones inevitables y de                                                    

desesperanza,pero que al mismo tiempo abren caminos y puertas hacia                                                           

la redención con uno mismo.

I

Hoy, cerré mis puños

gimiendo al alba,

vi, caer los mundos

con mi voz en llamas.

Vi, volar los huesos

contener la calma,

cascando desechos

con la faz cansada.

Vi, brotar los sueños

de mentes dopadas,

exhalar los vientos

con feroces armas.

Abrazar los cerros

en paganas danzas,

rasgar los miedos

con luces y salvas.

Salvas y luces

que flores marchitas,

Los hombres huyen,

Robarán más vidas.

II

Se escucha el relámpago,

Va rompiendo el cielo.

Estrellas, cayendo

en un firmamento.

Donde un corazón,

extraña este cielo.

Cruje la madera,

besando aquel fuego.

El fuego mortal de

Aquella alma en duelo.

La lluvia se viene a

Cubrir esta noche

El pueblo prohibido

En quietud del bosque.

III

Emoción rota, en tu boca yace

En ojos castaños cenizas nacen.

Sueños cansados, arden en la hoguera

Hiriente laten, en tu madriguera.

Besos y fuego que en pasión se enlacen

y tus manos los sueños, hoy sí alcancen

De rojo y violeta, solo él me quiera

De negro azabache, voy por doquiera.

Tus ojos castaños, mis ojos guarden

Tus labios mortales, mis besos maten

En un laberinto, yo me perdiera

y caricias a tí, yo darte hubiera.

VI

Va perdiéndose, en tu vacío espacio

Una lágrima, cae, yace perdida

Lánguida y amarga son las despedidas

El llanto se pierde, moja despacio

Se va y se esconde, un mundo de desprecio

Latidos guardan un alma vencida,

Ardiente llama en mi pecho encendida

y su cólera exhala menosprecio.

Ardiente hoguera, que recorre el viento

Dibujas frío, en tus ojos de invierno

Dibujas noches, de negro lamento.

Con besos, despiertas un negro infierno

Con mil besos, rompes el firmamento

Con un beso, sella el vacío eterno.

V

Sombras, detrás de la puerta

Un río escarlata, cruzar hoy deba

Sombras esperan, final de la senda

Susurran ocultas, su ansia despierta.

Llevándome presta, donde ir yo deba

La paloma cándida, el nido hoy deja.

Minutos se cuelan, granos de arena

Son solo sombras, detrás de la puerta.