A Rosalía, el ser editora le había abierto la puerta a conocer las mentes más brillantes del país y, también le había facilitado la posibilidad de trabajar desde cualquier emplazamiento, por lo …[Leer mas]

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Hay dos cosas que una mujer nunca debe hacer: liarse con el prometido de su mejor amiga y quedarse embarazada del prometido de su mejor amiga. Yo hice ambas. El alcohol tuvo la culpa. Los novios or…[Leer mas]

En el principio yo no existía, no existían los padres, ni los hermanos, ni la familia. Solo había un niño y una niña, arrojados a este mundo como partículas de un gran estornudo, desperdigadas p…[Leer mas]

Era una fría mañana cualquiera de un recién estrenado enero. El aire helado dificultaba la respiración y un olor a tierra mojada lo impregnaba todo. Otro año más y allí estaba yo, de pie, esper…[Leer mas]

<<Y volveré a decirte las mismas cosas que te decía y volveré a cantar zortzicos al pasar. Yo volveré a quererte con toda el alma Maitechu mía. Por oro cruzo el mar y debes espera…[Leer mas]

El sonido del móvil me estremeció. Tomé aire y aguanté la respiración para responder, como hacía cada mañana desde que Arturo permanecía intubado en la UCI-COVID. Es impresionante cómo…[Leer mas]

Amaneció un día precioso: el cielo de un azul intenso, el sol brillando con todo su esplendor… Decidió que tenía que aprovechar una mañana así para tomar el sol en el jardín de su casa. Se re…[Leer mas]

Con apenas cuatro años fue llevado a un orfanato en Pontevedra. Pero él no lo sabía, estaba desorientado, aturdido, tenía frio. No entendía por qué estaba allí, otro niño se le acercó y le pr…[Leer mas]

Vamos literalmente caminando a saltitos. De de la mano, como siempre. Nos miramos cada dos segundos. Aún voy sin bastón. Me da vergüenza ir con esta sonrisa, la gente que se cruza con nosotros nos …[Leer mas]